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Carmen Domingo

Leonor (II) y el Rockefeller Center

Creo que el tema Leonor va a durar más de lo que nos gustaría, y yo prometo no insitir más que lo justo. Sólo deciros que me sorprende que en la era de "lo que no se ve no existe" todavía tengamos que esperar unos días para ver las imágenes de "la futura reina" y que -¡menos mal!- ha sido la entrada en la clínica de un botones vestido con su tradicional traje rojo y cargado de una cesta para bebés el que me ha confirmado que el nacimiento no era una entelequia.

Luego ha sido la red, claro, la que me lo ha vuelto a confirmar. Porque la Casa Real ha registrado todos y cada uno de los dominios posibles de la "futurible"  ’reinaleonor’, ’princesaleonor’, ’infantaleonor’ ’infanta-leonor’, leonorreina’, ’leonorprincesa’, y ’leonordeborbon’ ( en todas sus extensiones comerciales, ’.com’, ’.net’, ’.org’, ’.biz’, y ’.info’). Aunque, Spais is diferent, claro está, se ha dejado uno ’princesa-leonor.com’ que lo ha comprado una empresa de diseño web. ¡Los listos! Y eso que yo soy de las que siempre dice que me lanzaré a comprar dominios y luego, llegada la hora, ni me acuerdo. ¡Menos mal que el mío lo tengo asegurado 5 añitos y no se me va a escapar que sino...

Además, nobleza obliga, la Casa Real ha enviado por su parte una solicitud a Red.es, entidad encargada de la gestión de ESNIC, solicitando el bloqueo de todos los que aludan directa o indirectamente al nombre de Leonor. La petición fue formalizada por la Casa Real y abarca prácticamente todas las variables posibles. De este modo, Red.es actuará conforme a la ley y bloqueará los dominios solicitados para comprobar si se ejerce un derecho legítimo sobre ellos. El que puede puede, ¿no os parece? Porque los demás si no estamos atentos nos quedamos sin nuestro nombre en la red en un periquete.

Una salvedad. Dice Isaías Peral Puebla, Jefe del Centro de Comunicaciones e Informática de la Casa Real, que el departamento técnico comenzó a registrar los nombres "justo después de que saliese publicado el comunicado oficial del nacimiento, cuando se supo que era niña y que se llamaba Leonor". Y yo, mirando mirando, porque eso sí que en la Red es fácil, veo que registraron los dominios a las 22.00 horas. Y ahora ya no sé si era Juan Carlos el único que no sabía cómo se iba a llamar la primogénita o si también en eso nuestro Rey nos miente. Vaya usted a saber.

Y lo peor, este runruneo como de fondo que se desprende desde los medios de que el nacimiento de la princesita va a hacer que se acerquen los dos partidos mayoritarios -léase PSOE, PP- que hasta ahora estaban algo resentidillos y dejen a un lado sus diferencias. Por aquello de que la reforma constitucional necesita dos terceras partes de la cámara. No, si va a resultar que va a ser la infanta del talante, ¡lo que nos faltaba!

En fin, y eso que a mí, en realildad, si queréis que os sea sincera, ahora mismo, lo que más me apetece sería ir a N.Y. y, tras un paseo por Central Park, o cualquier parte que me gusta toda la ciudad, subirme a la terraza-bar que han abierto en el Rockefeller Center, que llevaba 20 años cerrada, y disfrutar de las vistas de una de mis ciudades preferidas, aunque, me temo, no es tan fácil que se cumplan los deseos.

1 comentario

Nicolás -

Yo, como republicano, pienso que no ha nacido nadie especial, y por eso paso de comentar (y de leer) esto.
Creo que cuanto más se comenta este asunto, aunque sea para criticarlo, más fuerza se da a la monarquía. Porque su naturaleza simbólica queda reflejada en el universo mediático, y en el mundo irreal en el que vivimos (Baudrillard) la monarquía existe porque sale en los medios. ¡Pues que no salga!